CIUDAD DEL VATICANO.-
El Papa Benedicto XVI invocó hoy a los fieles a que con motivo de la
Navidad se acerquen a las personas con problemas, especialmente a los
enfermos, presos, ancianos y niños. Expresó que "donde hay acogida
recíproca, allí está Dios".
Ante cientos de miles de personas que
participaron en la plaza de San Pedro del rezo del Ángelus dominical, el
Pontífice comentó el Evangelio de este cuarto y último domingo de
Adviento, antes del tiempo de Navidad, que recuerda la visita de la
Virgen María a su prima Isabel, que "no solo representa un gesto de
cortesía, sino el encuentro del Antiguo con el Nuevo Testamento".
Benedicto XVI añadió que Isabel representa al Israel que ha envejecido aguardando al Mesías, lo que se cumple en la joven María, en beneficio de toda la Humanidad.
La escena de la visitación, en la que las dos mujeres llevan en sus entrañas una a Jesús y la otra a Juan, manifiesta la belleza de la acogida, remarcó el Papa.
Benedicto XVI añadió que Isabel representa al Israel que ha envejecido aguardando al Mesías, lo que se cumple en la joven María, en beneficio de toda la Humanidad.
La escena de la visitación, en la que las dos mujeres llevan en sus entrañas una a Jesús y la otra a Juan, manifiesta la belleza de la acogida, remarcó el Papa.
"Donde hay acogida, hospitalidad
recíproca, atención, espacio para el otro, allí está Dios y la alegría
que viene de El. Imitemos a María en el tiempo de Navidad, visitando a
todos los que tienen problemas, en particular los enfermos, los presos,
los ancianos y los niños. Imitemos también a Isabel que acoge al huésped
como Dios mismo", expresó.
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