Agobiado por problemas con su esposa y suegra, Rodrigo Palomino Polanco (55) asesinó a su hijo dándole de beber una sustancia tóxica, y luego se quitó la vida cortándose las venas de los antebrazos y el lado izquierdo del cuello con una gillette en el Hostal Continental de la ciudad de Barranca.
Según indicó el comandante José Luis Cornejo Guillén, comisario de Barranca, el homicida y suicida dejó en su lecho de muerte tres cartas en las que explica por qué tomó la fatal decisión que incluyó llevarse consigo al menor de 7 años identificado con las siglas R.P.N.
En una de las misivas pide a su madre que cobre su sueldo correspondiente al mes de diciembre y CTS a la empresa de seguros de Lima en que laboraba, informó la corresponsal de RPP en la zona.
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